UN DÍA EN AMBERES

Como siempre, lo primero es lo primero, saber si una excursión de un día a Amberes es suficiente para conocer la ciudad. Mi opinión es que sí. Un día es suficiente para conocer Amberes. Obviamente, cuanto más mejor pero como la mayoría de nosotros no podemos dedicar todo nuestro tiempo ni nuestro dinero al arte de viajar es mejor ponerse en el término medio.
Girasoles (naturales) en Amberes. Viaje a Bélgica
Amberes es una ciudad grande aunque con un casco antiguo relativamente pequeño y cómodo de visitar. El centro histórico de Amberes, además, está relativamente cerca de la estación central de tren, una media hora, con lo que la visita es relativamente cómoda para una excursión con base en Bruselas, por ejemplo.

Dentro de Bélgica Amberes no es una de las ciudades más apreciadas. Tendría por delante, sin duda, a Brujas y a Gante. A mi, sin embargo, me pareció que Amberes no las desmerece para nada. Amberes es una ciudad que no deberías perderte en un viaje a Bélgica.

Nada más llegar a Amberes te das cuenta de que la visita va a merecer la pena. La propia estación central de trenes es un verdadero monumento arquitectónico, tanto por dentro como por fuera y bien merece la pena detenerse a verla.
Foto interior de la estación central. Excursión a Amberes
Lo que no hay que perderse en Amberes, sin duda, es su Grote Markt, la plaza del mercado tan típica de las ciudades flamencas con su característica arquitectura. A mí fue lo que más me gustó.
Foto de la plaza del mercado. Excursión a Amberes
También vale la pena visitar en Amberes la iglesa de San Carlos Borromeo, una verdera joya de la arquitectura barroca.
Foto de una de las capillas de la iglesa de Carlos Borromeo en Amberes. Un día en Amberes
La catedral de Amberes es imponente también, con una única torre realmente desproporcionada que sobresale por encima del resto de edificios y que supone un perfecto punto sobre el que orientarse.
Imagen de la fachada de la catedral de Amberes. Viaje a Bélgica
Aparte de esto, Amberes es diferente a otras ciudades como Brujas o Gante en su mayor variedad de estilos arquitectónicos. Al ser una ciudad más grande y cosmopolita se dan muchos más ejemplos de arquitectura neoclásica o modernista. Una calle que merece la pena visitar y que además es una importante zona comercial es la calle Meir. Creo que es el mejor itinierario para ir de la estación central al casco histórico de Amberes disfrutando del paseo. A mí me recordo un poco a la zona del Graben en Viena o a la Gran Vía de Madrid, aunque la calle Meir de Amberes es peatonal.
Una estatua en la calle Meir, en la zona comercial de Amberes. Viaje a Bélgica
Naturalmente, y para ser fiel a mis costumbres me dejé algo por ver. En este caso fue la casa de Rubens. No fue falta de tiempo ni de dinero. Simplemente la casa de Rubens está algo alejada del centro histórico de Amberes y no nos apetecía hacer el desplazamiento. De vez en cuando hay que relajarse.
Torre de la catedral de Amberes desde las proximidades del río. Excursión a Amberes
Antes de terminar, como siempre, un par de consejos para tu visita a Amberes.

Las patatas fritas de Frites Max, junto a la catedral por su lado derecho, pueden ser una buena merienda. Las sirve una oronda señora flamenca en cucuruchos para tomar o para llevar.

Por supuesto, si eres aficionado a la compra de diamantes, debes saber Amberes tal vez sea el mejor sitio del mundo para disfrutar de tu hobby :-)


Una vista diferente de la torre de la catedral de Amberes. Excursión a Amberes
Foto del Grote Markt de Amberes, Bélgica
La torre de la catedral de Amberes tras los edificios de la plaza del mercado. Excursión a Amberes
Espero que esta información sobre mi viaje a Amberes de haya sido útil. Si necesitas más información sobre Bélgica puedes utilizar la nube de etiquetas o usar el buscador.

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